Costocondritis

01 Jun Costocondritis

¿Qué es la costocondritis?

En el artículo de esta semana os hablaremos de la costocondritis, la cual es una patología que proviene de la inflamación de los cartílagos que unen las costillas al esternón, conocidos como cartílagos costales. Para poder entender mejor de que se trata vamos a explicar que son las costillas.

Las costillas son huesos largos y curvos que forman parte de la estructura ósea del tórax humano, están compuestas principalmente de hueso y cartílago. Las primeras siete costillas se conocen como “costillas verdaderas” porque se conectan directamente al esternón (hueso del pecho) mediante el cartílago costal. Las siguientes tres costillas, a partir de la octava, se denominan “costillas falsas” porque se conectan al cartílago de la costilla superior en lugar de al esternón directamente. Las últimas dos costillas se llaman “costillas flotantes” ya que no se conectan al esternón ni a otro cartílago y son más cortas y menos curvadas que las demás costillas.

Causas

La causa no siempre está clara, pero se cree que puede estar relacionada con la irritación o inflamación de los cartílagos costales debido a traumatismos, infecciones respiratorias, movimientos bruscos, lesiones musculares o esfuerzos repetitivos. También puede presentarse como una complicación de enfermedades como la artritis reumatoide o la espondilitis anquilosante.

Síntomas

Los síntomas pueden variar, pero los más comunes incluyen:

1. Dolor en el pecho. El dolor puede ser punzante, agudo o doloroso.
2. Sensibilidad al tacto. El área puede verse sensible al tacto o a la presión, incluso en actividades cotidianas como toser o estornudar.
3. Dolor al respirar. La respiración profunda o el movimiento de expansión del tórax pueden causar molestias e incluso dolor.
4. Dolor que se irradia. El dolor se puede esparcir hacia los brazos y los hombros, lo que puede confundirse con un problema cardíaco. Sin embargo, la costocondritis no está relacionada con el corazón.
5. Malestar al moverse. Los movimientos del torso, como girar o inclinarse.
6. Inflamación y enrojecimiento: En algunos casos, puede haber una ligera hinchazón y enrojecimiento en la zona afectada.

Tratamiento

El tratamiento de la costocondritis se centra en aliviar los síntomas y promover la curación. Esto puede incluir uno de medicamentos analgésicos o antiinflamatorios no esteroides para reducir el dolor y la inflamación. Además, se pueden recomendar medidas como la aplicación de compresas frías o calientes en el área afectada, el descanso, la evitación de actividades que empeoren los síntomas y la práctica de técnicas de relajación.

¿Cómo prevenirlo?

Si bien no existen medidas preventivas específicas, se pueden tomar algunas precauciones para reducir el riesgo a desarrollarlo.

A continuación, algunas recomendaciones:

• Evita lesiones y movimientos bruscos.
• Mantén una postura adecuada, tanto al estar sentado como de pie.
• Realiza ejercicios de fortalecimiento y estiramiento.
• Evita estrés excesivo en el pecho.
• Mantén un peso saludable.
• Realiza calentamiento antes de hacer ejercicio.
• Trata las infecciones respiratorias de manera adecuada.

En la mayoría de los casos, la costocondritis mejora con el tiempo y no suele causar graves complicaciones. Pero recuerda, si experimentas dolor en el pecho o tienes alguna preocupación, es muy importante consultar a un médico para recibir un diagnóstico preciso y seguir el tratamiento correcto.